La reforma electoral es una simulación que no garantiza la democracia: PAN BC
TIJUANA.- El Partido Acción Nacional (PAN) en Baja California calificó como una simulación la reforma electoral impulsada por el gobierno federal, al considerar que no responde a las necesidades de garantizar procesos democráticos sólidos en México.
César Israel Damián Retes, diputado federal del PAN, señaló que la iniciativa pretende elaborarse desde el poder ejecutivo, sin abrir espacios de diálogo con partidos políticos ni consejeros electorales.
"Las reformas electorales no se hacen desde el poder. Y hoy la reforma la quieren hacer con una comisión presidencial desde el poder ejecutivo, donde todos los que están en esa comisión están a las órdenes de la presidenta. En donde la misma presidenta ya dijo que no se van a reunir con los partidos políticos, que no van a escuchar a los consejeros electorales. Pues entonces, ¿de qué se trata? Tiene que representarse la pluralidad de nuestra sociedad", dijo.
El legislador advirtió que Acción Nacional permanecerá atento al desarrollo de la propuesta para exigir que se mantengan principios fundamentales como la transparencia en los procesos electorales.
"Sin transparencia, pues las cosas quedan por debajo de la mesa. Y eso es intolerable. No lo podemos dejar pasar", agregó.
También destacó que la participación ciudadana debe ser uno de los ejes centrales de cualquier cambio legal en materia electoral, ya que sin ella se corre el riesgo de debilitar la confianza en las instituciones.
Otro de los puntos subrayados por el diputado fue la necesidad de preservar la pluralidad en el Congreso de la Unión, como reflejo de la diversidad de la sociedad mexicana.
"Algo importante también es que no podemos eliminar la pluralidad en el Congreso. La sociedad mexicana no está representada por un solo partido y en el Congreso deben de estar representadas todas las partes de la sociedad", concluyó.
Damián Retes reiteró que Acción Nacional mantendrá firme su postura de defensa de la democracia, con el objetivo de que ninguna reforma electoral limite la representación política ni los derechos de la ciudadanía.