Cómo elegir el aceite adecuado para cocinar sin poner en riesgo tu salud
Tijuana.- ¿Te has preguntado si el tipo de aceite que utilizas al momento de cocinar es el correcto? Más allá de aportar sabor, el aceite influye directamente en tu salud y en la seguridad durante la preparación de los alimentos. Elegir el adecuado puede marcar una gran diferencia en el valor nutricional de tus platillos y ayudarte a evitar riesgos asociados al uso incorrecto de ciertas grasas.
Cada aceite tiene un "punto de humo", es decir, la temperatura a la que comienza a descomponerse y a liberar compuestos potencialmente nocivos. Cuando se supera este límite, el aceite puede generar radicales libres y sustancias tóxicas como la acroleína, que afectan al sistema respiratorio y tienen posibles efectos cancerígenos.
Por ejemplo, el aceite de oliva extra virgen es ideal para aderezos o preparaciones a baja temperatura debido a su delicada composición. Los aceites de girasol y de maíz son adecuados para freír, aunque se recomienda usarlos con moderación. Por otro lado, el aceite de coco y el de aguacate resisten mejor las altas temperaturas, por lo que son recomendables para freír o saltear alimentos. En contraste, reutilizar el aceite de forma excesiva puede generar residuos perjudiciales para la salud y alterar el sabor de los alimentos.
Elegir aceites saludables no solo mejora la calidad de la comida, sino que también aporta beneficios nutricionales. Los aceites ricos en grasas insaturadas, como el de oliva, aguacate o canola, contribuyen a reducir los niveles de colesterol LDL ("malo") y protegen la salud cardiovascular. Además, algunos contienen antioxidantes naturales que combaten el envejecimiento celular y fortalecen el sistema inmunológico.
Sin embargo, utilizar el aceite de manera incorrecta puede tener consecuencias negativas. Recalentarlo en varias ocasiones o almacenarlo de forma inapropiada favorece la formación de compuestos tóxicos, incrementa el riesgo de enfermedades cardíacas y aporta calorías innecesarias. También puede ocasionar contaminación cruzada si no se maneja con las debidas medidas de higiene.
Para cocinar de forma saludable, es recomendable elegir el aceite según el tipo de cocción, evitar reutilizarlo más de dos veces y no permitir que humee durante la preparación. Asimismo, es importante conservarlo en lugares frescos y oscuros para evitar su oxidación. La cocina saludable no depende únicamente de los ingredientes principales, sino también del tipo de grasa que se utiliza.