
por Redacción
01/05/2025 08:45 / Uniradio Informa Baja California / Sociedad / Actualizado al 30/04/2025
EUROPA.- El lunes 28 de abril, España vivió una jornada inédita cuando un apagón nacional dejó al país sin electricidad durante varias horas, afectando a hogares, comercios y servicios esenciales. La falta de suministro eléctrico provocó un colapso generalizado: los sistemas de pago digital cayeron, se interrumpió el acceso a internet y a las redes móviles, generando una profunda incertidumbre entre la población, que temía un conflicto mayor debido a la falta de información.
En medio de la confusión, los radios a pilas se convirtieron en una herramienta esencial para mantenerse informado. La alta demanda de estos dispositivos hizo que comenzaran a escasear en los comercios, donde su precio se duplicó rápidamente. Los pocos negocios que permanecieron abiertos se convirtieron en puntos de encuentro, donde los ciudadanos se congregaban para escuchar las noticias y compartir momentos de calma en medio de la crisis.
La falta de acceso a pagos digitales también hizo que el efectivo cobrara una importancia crucial. Aquellos que disponían de dinero en efectivo pudieron realizar sus compras, mientras que otros dependían de la solidaridad de sus vecinos para sobrevivir al día.
Aunque el apagón dejó al país en un estado de incertidumbre, también subrayó la importancia de la convivencia y la solidaridad en tiempos de crisis. En lugar de centrarse únicamente en el caos, los españoles encontraron consuelo en la cercanía humana. La gente se unió en pequeños grupos, compartiendo no solo recursos, sino también apoyo emocional. Ante la ausencia de tecnología y la falta de información clara, la conexión humana se convirtió en un refugio esencial