Sentencia del "Pozolero" es mínima comparada con el daño que causó
- Activistas consideran que Santiago Meza podría salir libre en diez años
TIJUANA.- Fernando Oceguera Flores, activista por los desaparecidos en Baja California, consideró que la sentencia de 30 años 8 meses que recibió Santiago Meza, alias "El Pozolero", es mínima comparada con el daño que causó a las familias.
En entrevista, reconoció que la autoridad solo pudo comprobar que Santiago Meza cometió el delito de secuestro y crimen organizado, por lo que la sentencia que se le dictó fue la que la Ley establece y de alguna manera eso les da paz.
"Nosotros hubiéramos querido que hubiera sido más, pero así es la ley y tenemos que aceptar las cosas como son", reiteró.
Fernando Oceguera busca desde el 10 de febrero de 2007 a su hijo, Fernando Oceguera Ruelas, que desapareció a la edad de 23 años, cuando un escuadrón de supuestos oficiales federales lo sacó de su casa; teme que pudiera ser uno de los más de 300 cuerpos que deshizo en ácido "El Pozolero" en la finca denominada "La Gallera".
Oceguera Flores, quien ahora integra la Asociación por los Desaparecidos de Baja California, aseguró que el consenso entre quienes buscan a sus familiares es que la sentencia de 30 años fue menor, aun así, les da paz de que el inculpado ya no estará en la calle.
"Pienso que la sentencia sería difícil de definir porque ya no vamos a recuperar a nuestros seres queridos, sin embargo es una paz de saber que ese señor ya no va a andar en las calles haciendo otra vez lo que hacía con anterioridad", dijo, "así le den 20 años, 15 años, no nos van a poder regresar a nuestros seres queridos, entonces creo que se está aplicando la ley conforme a los delitos que fueron posibles fundamentar", agregó.
Aseguró que ahora que Meza está en la cárcel, el objetivo de las personas que buscan a los desaparecidos es extraer los 16 mil 500 litros de emulsión orgánica que todavía están encapsulados en "La Gallera" para practicarles pruebas de ADN con la esperanza de encontrar a sus familiares.
"Tenemos la obligación nosotros de sacar todo lo que quedó ahí porque están encapsulados, y poder por medio de ADN, haber si podemos encontrar algunos de nuestros seres queridos", concluyó.