13/05/2025 12:16 / Uniradio Informa Baja California / Gobierno / Actualizado al 13/05/2025
CALIFORNIA.- El gobernador Gavin Newsom y el fiscal general Rob Bonta presentarán hoy una moción de orden judicial preliminar para detener los aranceles ilegales de la administración Trump. La orden judicial se presentó como parte de la demanda de California que impugna el uso de poderes de emergencia por parte del presidente Trump para promulgar aranceles de amplio alcance que perjudican a los estados, los consumidores y las empresas.
Se proyecta que los aranceles impugnados en la demanda de California costarán, como mínimo, 25 000 millones de dólares a los consumidores californianos y provocarán la pérdida de más de 64 000 empleos. Sin embargo, se estima que el costo total de los aranceles del presidente Trump superará los 40 000 millones de dólares para los hogares californianos.
El presidente Trump se ha excedido en su autoridad, y ahora las familias, las empresas y nuestros puertos están pagando las consecuencias. Como la mayor economía del país, California es la que más tiene que perder con las políticas débiles e imprudentes del presidente Trump, espresó el Gobernador Gavin Newsom
"El otoño pasado, los estadounidenses en las urnas exigieron precios más bajos. Ahora, la caótica guerra arancelaria de Trump amenaza con disparar el costo de vida de las familias, reducir los salarios, recortar empleos y sumir a los empresarios e innovadores en una espiral de incertidumbre", declaró el Fiscal General Rob Bonta. "Seamos claros: la incertidumbre y la imprevisibilidad son perjudiciales para los negocios, la economía y California. California experimentará una parte considerable de las pérdidas debido al crecimiento de nuestra economía, nuestra fuerza laboral y nuestra exposición al comercio. Estamos haciendo todo lo posible y hoy solicitaremos al tribunal que detenga de inmediato estos aranceles ilegales mientras California presenta su caso", señaló El Fiscal General Rob Bonta
Como la economía más grande del país y la cuarta más grande del mundo, los aranceles ilegales del presidente Trump están teniendo un profundo impacto en el presupuesto de California y en cómo el estado puede satisfacer las necesidades de sus residentes.
El dominio económico amenazado por la imprudencia
California es la columna vertebral de la economía nacional. Su producto interno bruto (PIB) fue de 4,1 billones de dólares en 2024. El estado impulsa el crecimiento económico nacional y, además, destina al gobierno federal más de 83 000 millones de dólares adicionales a los fondos federales que recibe. California es el principal productor agrícola del país y también el centro de la producción manufacturera de Estados Unidos, con más de 36 000 empresas manufactureras que emplean a más de 1,1 millones de californianos. Las empresas manufactureras del Estado Dorado han creado nuevas industrias y abastecido al mundo con productos manufacturados que abarcan la industria aeroespacial, la informática, la electrónica y, más recientemente, los vehículos de cero emisiones.
Impactos en el comercio y los puertos
California generó casi $675 mil millones en comercio bilateral en 2024, lo que generó millones de empleos en todo el estado. El impacto de las políticas arancelarias del presidente ya está teniendo un impacto descomunal en los principales puertos del estado, lo que reduce el número de turnos para los trabajadores californianos en la descarga y el transporte de mercancías. Un estudio reveló que una disminución de tan solo el 1% en la carga a los puertos de Los Ángeles y Long Beach eliminaría 2,769 empleos y pondría en peligro hasta 4,000 más .
Los mayores costos asociados con estos aranceles también tendrán efectos dominó en toda la cadena de suministro, afectando no sólo a los estibadores sino también a los camioneros, fabricantes y minoristas en todo el estado y el país.
Impactos en el presupuesto estatal
Se espera que California pierda la asombrosa cifra de 7.800 millones de dólares en ingresos fiscales provenientes del impuesto sobre la renta personal, las ganancias de capital y los ingresos corporativos como resultado del impacto de los aranceles en los contribuyentes californianos. Esta extraordinaria pérdida de ingresos esenciales se ve agravada por el enfoque impredecible y caótico en la imposición de aranceles, lo que ha dificultado enormemente que California y sus agencias gestionen eficazmente sus presupuestos, planifiquen el futuro y brinden un servicio adecuado a los californianos.
Los perjuicios de los aranceles actuales y su incertidumbre se reflejan en la proyección económica de California, recientemente revisada a la baja, para el Presupuesto del Gobernador 2025-2026. En concreto, este pronóstico proyectó un aumento del desempleo y la inflación a corto plazo, y redujo considerablemente el crecimiento proyectado de los salarios y los ingresos empresariales, así como del empleo y los ingresos personales. Estos impactos fiscales de los aranceles tienen efectos inmediatos y devastadores en el presupuesto de California, lo que a su vez podría resultar en recortes drásticos en los programas y servicios del estado.
Impactos en los servicios estatales
Además, muchas agencias, como el Departamento de Servicios de Atención Médica de California y el Departamento de Salud Pública de California, contratan a proveedores para la compra de bienes esenciales fabricados fuera de Estados Unidos, incluyendo más de 8 mil millones de dólares en productos farmacéuticos, 300 millones de dólares en suministros para la diabetes, 3 millones de dólares en vacunas contra la gripe pediátricas y para adultos, y 700,000 dólares en kits de pruebas de detección de enfermedades, entre otros bienes esenciales. Los aranceles del presidente imponen a California un aumento significativo en los costos para mantener el acceso a estos bienes esenciales a través de sus contratos.
Además de la próxima orden judicial preliminar, California también presentará hoy mismo un escrito amicus curiae en el Tribunal de Comercio Internacional en el caso Oregon v. Trump, un caso que impugna la imposición ilegal por parte del Presidente Trump de los llamados aranceles de "emergencia".
