La campaña del caos de Trump en Los Ángeles

-El sábado, hubo más de 250 manifestantes antes del despliegue de la Guardia Nacional. El domingo, tras el despliegue ilegal de la Guardia Nacional ordenado por el presidente, los manifestantes aumentaron a más de 3000. La presencia militar está incitando e incentivando las manifestaciones.

LOS ÁNGELES.- Desde el impulsivo memorando del presidente Trump y las medidas para enviar militares a la región de Los Ángeles, el estado ha seguido trabajando con socios locales para aumentar el número de más de 800 agentes del orden estatales y locales en Los Ángeles para limpiar el desastre causado por el presidente Trump. Las fuerzas del orden locales y estatales han tenido que intervenir para proteger la seguridad pública. La Guardia Nacional se encuentra actualmente de guardia frente a los edificios federales, y las fuerzas del orden locales y estatales realizan todo el trabajo. Además, las tropas enviadas estaban "extremadamente mal preparadas" y duermen en el suelo.

Las acciones del Presidente no sólo han causado pánico y caos generalizados, sino que han creado innecesariamente una desviación adicional de recursos mientras el estado intenta calmar a una comunidad aterrorizada por esta imprudente acción federal.

Esto es lo que está haciendo el gobernador Newsom al respecto:

• El domingo, el gobernador Newsom solicitó formalmente la revocación de la federalización de los miembros de la Guardia Nacional y que el estado recuperara el control, como corresponde. También se reunió con los líderes locales de las fuerzas del orden en el terreno para informarles sobre la situación.
• El lunes, el gobernador y el fiscal general Rob Bonta  presentaron una demanda contra la administración Trump por su toma ilegal de control de la Guardia Nacional de California. El gobernador también se reunió con funcionarios locales y estatales en el lugar para una sesión informativa actualizada.
• El martes, el gobernador Newsom y el fiscal general Bonta solicitaron al tribunal que interviniera para bloquear de inmediato la militarización innecesaria de Los Ángeles por parte de la administración Trump para incluir la aplicación de la ley migratoria en las comunidades.

Trump está provocando deliberadamente disturbios, mientras nuestra democracia pende de un hilo.

El presidente Trump está sembrando el caos deliberadamente, generando miedo y desorden para obtener rédito político y así justificar el despliegue de tropas. Esto no es seguridad pública, es teatro autoritario. El presidente ha mentido a cada paso: sobre la coordinación con el estado, sobre la Guardia Nacional y sobre las condiciones sobre el terreno. Dijo que la ciudad estaba "bajo control" gracias a la Guardia Nacional, cuando ni siquiera se había desplegado.

Las acciones autoritarias del presidente amenazan nuestra democracia. No se puede amenazar con arrestar a un gobernador solo por no estar de acuerdo con él. Como dijo el gobernador Newsom, las acciones del presidente Trump representan "un paso inequívoco hacia el autoritarismo".

Militarización ilegal 

El 7 de junio, un día después de que comenzaran las protestas, el presidente Trump emitió un memorando que pretendía autorizar al Departamento de Defensa a llamar a 2.000 efectivos de la Guardia Nacional al servicio federal por un período de 60 días, y declaraba una "forma de rebelión contra la autoridad del Gobierno de los Estados Unidos" y ordenaba al Secretario de Defensa coordinar con los gobernadores estatales y la Guardia Nacional para comandar las milicias estatales.

La acción pone en peligro la soberanía del estado, ya que su orden no era específica para California y sugiere que el Presidente podría asumir el control de cualquier milicia estatal. 

La Constitución de los Estados Unidos y la autoridad del Título 10, invocada por el Presidente en el memorando, exigen que el Gobernador consienta la federalización de la Guardia Nacional, algo que el Gobernador Newsom no tuvo la oportunidad de hacer antes de su despliegue y que confirmó no haber otorgado poco después. La orden ilegal del Presidente vulnera el rol del Gobernador Newsom como Comandante en Jefe de la Guardia Nacional de California y viola el derecho soberano del estado a controlar y disponer de su Guardia Nacional en ausencia de una invocación legítima del poder federal.

Además, el Departamento de Defensa ha ampliado las funciones de CalGuard, ordenándoles ayudar a los agentes del ICE en actividades de aplicación de la ley civil, incluido el arresto y la detención de inmigrantes y otras personas que puedan ser sospechosas o acusadas de interferir con el ICE, una violación directa de la Constitución de los EE. UU. y los derechos de los ciudadanos estadounidenses. 

Trump está desfinanciando la seguridad pública

La propuesta presupuestaria del presidente Trump, que los republicanos afirman que "solucionaría" la crisis que crearon en Los Ángeles, en realidad recorta los fondos para las iniciativas de seguridad pública en todo el país. Recorta:

• 1.000 millones de dólares en 40 programas de subvenciones del Departamento de Justicia (DOJ) que apoyan a los departamentos de policía y reducen los delitos violentos, los delitos de odio y los delitos contra las mujeres.
• 646 millones de dólares de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) para la prevención de la violencia y el terrorismo.
• 545 millones de dólares del Buró Federal de Investigaciones (FBI), reduciendo su fuerza laboral en más de 2.000 personas y su capacidad para mantener a los criminales fuera de las calles.

La propuesta presupuestaria del presidente endeudaría aún más a nuestro país, traicionando a sus partidarios de una promesa que les hizo. Quiere distraer la atención de este proyecto de ley impopular y desastroso creando una crisis en Los Ángeles.

La hipocresía en plena exhibición

En 2020, el presidente Trump declaró que no federalizaría a los miembros de la Guardia Nacional sin la aprobación previa del gobernador del estado . Su propio jefe del Departamento de Seguridad Nacional declaró el año pasado que federalizar la Guardia Nacional sería un ataque directo a los derechos estatales . El gobierno federal está añadiendo más soldados de la Guardia Nacional e infantes de marina a una situación ya de por sí problemática cuando ya no son necesarios. Hay 1600 soldados esperando órdenes en las armerías de la zona.