por Redacción
18/12/2025 09:30 / Uniradio Informa Baja California / Sociedad / Actualizado al 18/12/2025
TIJUANA.- Algunas organizaciones tienen el gran reto de mantener operaciones el 25 de diciembre y el 1 de enero, que son días de descanso obligatorio en México, sin embargo puede chocar si sus colaboradores buscan ejercer su derecho al descanso para pasar tiempo con la familia. El reto, más allá de la ley, está en cómo llegar a acuerdos que no perjudiquen a ninguna de las partes.
El Dr. Cristóbal Hernández Tamayo, académico de la Escuela de Administración y Negocios de CETYS Universidad, Campus Tijuana, explicó que la Ley Federal del Trabajo es clara al establecer estas fechas como días de descanso obligatorio. Sin embargo, señaló que en la práctica el verdadero desafío para las empresas es que ambas partes "ganen" y gestionar la negociación cuando existe la necesidad operativa de trabajar.
"Las empresas saben que son días de asueto y los trabajadores también. El punto crítico no es si se puede obligar a laborar, porque no se puede, sino cómo construir acuerdos cuando la operación lo exige y el trabajador prioriza el descanso y la convivencia familiar", puntualizó.
De acuerdo con el especialista, la responsabilidad recae en las gerencias y áreas de recursos humanos, quienes deben abrir espacios de diálogo y mesas de negociación, especialmente en sectores donde la actividad económica no se detiene. "La clave es diseñar estrategias de convencimiento basadas en beneficios reales, no en la imposición".
Algunas empresas, explicó, han optado por ampliar sus esquemas de compensación, ofreciendo incentivos como bonos especiales, reconocimientos por compromiso, o días de descanso con goce de sueldo en fechas posteriores. Estos mecanismos permiten que el colaborador perciba una ganancia clara al aceptar laborar en días festivos.
"No se trata de pedir un favor ni de presionar. Todo acuerdo debe surgir del consentimiento mutuo entre patrón y trabajador, y es recomendable formalizarlo mediante formatos simples que den certeza a ambas partes", añadió.
El Dr. Hernández Tamayo recalcó que los trabajadores cuentan con respaldo legal para negarse a laborar en estas fechas, pero también destacó que, cuando se analizan indicadores como productividad, impacto operativo y bienestar laboral, es posible construir esquemas que generen resultados positivos tanto para la empresa como para el colaborador.
Finalmente, recomendó a las organizaciones invertir en sistemas de remuneración flexibles que permitan visualizar las ventajas de colaborar en días festivos y fortalecer una cultura laboral basada en el respeto, la negociación y el ganar-ganar.
"Las mejores decisiones no surgen de la imposición, sino del acuerdo. Cuando ambas partes entienden qué gana la otra, los conflictos disminuyen y las relaciones laborales se fortalecen", concluyó.