
por Octavio Fabela
26/06/2025 22:00 / Uniradio Informa Baja California / Sociedad / Actualizado al 23/06/2025
TIJUANA.- Especialistas en comportamiento animal alertaron sobre una tendencia creciente que afecta el bienestar de las mascotas: tratarlas como si fueran humanos, algo que suele hacerse con buenas intenciones, pero la aleja de su naturaleza.
Ricardo Painani, Director de Cinología México Internacional, explicó que este fenómeno es resultado de una visión egoísta del ser humano, que proyecta sus emociones y necesidades en los animales, olvidando que perros, gatos y otras especies requieren estímulos, rutinas y entornos acordes a su biología.
"Nuestra sociedad está cayendo en la promoción de una utopía donde nadie se atreve a decir que alguien está equivocado; si quieres ser un árbol o un pajarito, todos te dicen que está bien", expresó.
El especialista señaló que acciones como vestir a los perros, pasearlos en carriolas o limitar su interacción con otros animales pueden afectar su comportamiento y salud mental, porque los aleja de su naturaleza y representar una forma de irrespeto hacia su identidad como especie.
"Los animalitos merecen todo nuestro respeto, pero para poder respetarlos hay que entenderlos como animales. Un perrito necesita salir, oler a otros perros, correr, jugar, gruñir, jerarquizar... y ahora los traemos en carreola."
Apuntó que aunque los animales domésticos han mostrado gran capacidad de adaptación, forzarlos a actuar como humanos va en contra de su bienestar natural.
"Claro que los perros se adaptan a todo, por eso llevan 40 mil años acompañándonos, pero también les hacemos daño imponiéndoles nuestras ideas", dijo el director de Cinología México Internacional.
Subrayó que respetar a las mascotas implica conocer sus necesidades como animales, no solo brindarles afecto, por lo que desde el Canódromo Caliente buscarán promover una convivencia sana incluye permitirles socializar, ejercitarse y expresar sus instintos, en lugar de imponerles estilos de vida que responden más al deseo de sus dueños que a lo que verdaderamente necesitan.
"Se llegó a plantear en algunos países que entrenar a un perro en obediencia o protección iba en contra de su bienestar, como si hacer algo que no quieren fuera un abuso. Esto es tan absurdo como el joven que demanda a sus padres porque no pidió nacer y ahora no quiere trabajar a los 30 años", finalizó.